miércoles, 21 de noviembre de 2012

Por el placer de la palabra escrita

Luna descubriendo a tierna edad el placer de la lectura

La vida de los adultos no deja mucho tiempo para jugar, dejad que os lo diga.

Por eso, la foto de arriba, hecha a toda prisa, en la que aparece la muñeca de mi hermana en la casa de muñecas de mi madre, tendrá que hacer de placeholder por el momento, mientras hago votos de actualizar esto contando algo de mis propios muñecos... no sé, quizá en 2015 ya si eso.

Pero quería escribir aquí para responder a una inquietud muy importante que mostraba hace unas semanas una de nuestras más bellas e ilustres artistas de muñecos. Venía a decir, poco más o menos:

OMG RECOMENDADME MÁS LIBROS DE NIÑOS CANTORES EN INTERNADOS

... no con estas palabras, pero esa era la idea. Así que voy a intentar hacer algo al respecto.

Cry to heaven, que está editado en español como Un grito al cielo, no deja de ser una novela rosa (como casi todo lo que escribe Anne Rice, por lo menos antes de su conversión al cristianismo, ahora no sé); pero una novela rosa tan bien documentada, escrita de una manera tan sensual, tan llena de dorados y luz de velas y música y HOMOEROTISMO MASCULINO (como casi todo lo que escribe Anne Rice... por lo menos antes de su conversión... XD), que como experiencia de lectura alcanza una intensidad emocional difícil de repetir. Dicho esto, quizá valdría la pena explorar este listado de libros de ficción ambientados en coros infantiles y/o escuelas de música (!) que se han molestado en recopilar los viciosos de The Boy Choir & Soloist Directory. Porque, efectivamente, hay [al menos] un sitio web dedicado a niños cantores ^.^

No he leído ninguno de estos libros, salvo Cry to heaven, que también está reseñado ahí. Algunos tienen buena pinta. Otros no tanta. Pero los mejores son sin duda los de Joselito XDXD. Anyway, sí leí en su momento otra cosa completamente diferente:

Las amistades particulares, por Roger Peyrefitte

Esto no es una novela rosa. Esto es un libro apasionado, delicado y elegíaco del que André Gide dijo: "Yo no sé si usted ganará el premio Goncourt, pero lo que sí sé es que dentro de cien años se seguirá leyendo sus Amistades particulares". Hay un niño de doce años, hay un niño de quince años, hay más niños. Hay adultos, que ven oscuridad en todas partes (qué vamos a esperar de un colegio de curas >.<). Las amistades particulares tiene su propio artículo en Wikipedia, pero no hay que leerlo antes de haber leído el libro, porque 1) spoiler!, y 2) es doloroso ver tan resumido y simplificado un libro bello y complejo.

En fin, que Gide seguramente tenía razón, y según ha demostrado la historia de la literatura, no era solo porque al propio Gide le gustaran "inapropiadamente" los niños. Esto se publicó en 1943 y seguimos leyéndolo. Así que hala, hala, a leer.

Por lo menos quien tenga tiempo >.<